viernes, 27 de marzo de 2009

En ningún lugar.

Una de las grandes gracias de este blog, es que no es "mi" blog, entonces me siento con la libertad de describir hasta lo patético. Es una forma de desahogarme, pero de un ahogo que estando cerca no se puede entender. Así que comienzo agradeciendo a las personas que han comentado algo acá, y que no me conocen.

El comienzo de este blog se remonta al 25 de noviembre de 2007. En aquella época estaba en Santiago, solo, estudiando para dar el examen de grado. Y sí, estudié. Fui al estadio también, salí un par de veces, recibí un par de visitas, vi muchas películas piratas y sería todo.

Han pasado 16 meses. Hace un par de días reprobé el grado, por primera vez. No dolió tanto, aunque lo sentí injusto. Lo suficiente para pararme apenas vi esa bola negra y dejar a la presidenta de la comisión hablando sola.

Al menos tenía claro que en esa universidad no iba a seguir. Desde 1999 me preguntaba como mierda había terminado en esa privada, sin prestigio, sin nada. Y lo peor es que el puntaje de la PAA me daba para entrar a cualquier universidad, incluso donde siempre pensé que iba a estudiar, en la Chile.

Entre pendejerías, presiones familiares, comodidad, etc, me quedé en mi ciudad, y bueno, nunca estuve estudiando en ella. Es decir, aprobé los ramos con relativa comodidad, tanta que mis contemporáneos aún recuerdan cuando sorprendía a los profesores respondiendo materias que no habían pasado (y que quizás ni conocían, diría un mal hablado). Pero siempre me sentí como un extraño, el nivel de enseñanza de la universidad era peor que el del colegio del cual egresé.

Fue duro, pasar de uno de los mejores colegios de Chile, a una de sus peores universidades. Pero igual me las arreglé para hacer algo más. Descubrí los Congresos de Derecho, a los que envié ponencias que siempre fueron seleccionadas para exponerlas. En 2003 tuve mi debut en la Universidad de Chile, y fue bastante bueno. Felicitaciones y hasta un mail ofreciendo prórrogas para "arreglar" las ponencias y publicarlas. Me molestó el hecho de ver que otros habían enviado “borradores” a modo de ponencias, y entendí ese correo como un arreglín para que esos muchachos, hoy profesores de derecho en universidades de verdad tuvieran la oportunidad de terminar sus trabajos para ser publicados. No respondí ese correo, no cambié nada de mi ponencia, y no la publicaron.

En fin, conocí personas muy importantes en mi vida, hice buenas relaciones, mi ponencia de 2005 no sé como llegó a Argentina y es citada en un artículo de un congreso de Urbanismo y Población, otra está publicada en Perú, y sería todo el reconocimiento. Otro trabajo estaba por ser publicado en Chile, pero lo retiré de ese concurso por problemas con la Revista.

Pero no es ese el tema. Toda esta introducción es para comentar que di el examen de grado, y reprobé. Marzo de 2009. Si nunca hubiese reprobado un ramo, hubiese egresado en 2003. Como reprobé un par, tuve una carga académica demasiado grande en 2004, pero que no era tan grande en realidad, varios ramos chicos, una práctica, nada incompatible. Pero para variar no hubo concesión a mi persona, así que terminé todos los ramos serios en 2004 y tuve que matricularme el 2005 para hacer tres ramos trimestrales, dos semestrales y la memoria. Ya tenía 26 años y recién egresaba de la carrera.

Entremedio hice un cortometraje, que clasificó a un par de festivales (lejos el más importante fue el de Valdivia en 2007). Lo que nos ocurrió a todos los seleccionados en la categoría “Video Regional” fue asombroso…ganó un corto que no estaba seleccionado en esa categoría. Lamentablemente no estaba presente cuando ocurrió esa chacota, pues algo hubiese hecho. Mi coequipo me contó que se quedó estupefacto y no atinaron a hacer nada, pidieron un par de explicaciones y todos se lavaron las manos.

Tras este paréntesis “artíshtico” seguí por la ruta de la norma jurídica, pero desviándome hacia cualquier materia que no fuese derecho civil o derecho procesal, que era lo que sí tenía que estudiar.

Y ahora, a punto de cumplir 30 años, tengo un currículum que es muy entretenido, pero que no es nada. Ni académica ni laboralmente. Nada.

Varios de mis amigos se ganaron becas de doctorado, otro ex compañero tiene un libro publicado, con quienes compartí aula como estudiante-expositor están titulados y varios de ellos son profesores universitarios.

Y me siento agotado. Sé muchas cosas, ¿pero a alguien le importa? En ese noviembre de 2007 me preguntaba: “¿Madurar será dejar de buscar lo que nunca encontraste?”, y un anónimo me respondió: “Yo creo que madurar es cuando todavía sueñas, pero ahora tienes que hacerlo a escondidas...”.

Mis amigos se están casando, y yo no veo nada más lejano y aterrador que eso.

Por ahora me basta con tener las necesidades básicas cubiertas: Casa-Comida-Abrigo, y seguir existiendo como yo. Luego buscaré la forma de mantener mi derecho a sostener posiciones, que siento que cada vez queda desmejorado frente a quienes sí han logrado metas.

Buscar la verdad y la luz tiene el precio de vivir en penumbras. Quienes aceptan esa realidad no tienen problemas. Pero descorrer los velos significa saber que están ahí, y que desde ahora en adelante nada es como parece. Quien sabe si el precio de buscar la verdad sea encontrarla.

martes, 19 de febrero de 2008

"Tardes de cine"

Estos días he aprovechado la visita de mi hermano a Santiago, para ir al cine. Bueno, mientras mi mamá, mi hermana y una tía se dedican a otras cosas, con Javier nos escapamos al cine.

Este lunes vimos "No country for old men", horriblemente traducida como "Sin lugar para los débiles".

Una muy buena película, nominada al Oscar, de los hermanos Coen. Buena historia, bien narrada, bien actuada. Es el tipo de cine que me gusta, donde nadie sobra, donde las cosas pasan rápido y sin tiempo para lecciones morales. Esas dependen de cada espectador, no de los personajes dentro de la película. Totalmente recomendable, a pesar de que el último sabor que me dejó no fue precisamente agradable. Quizás es como esos tragos medios amargos, un campari naranja por ejemplo, que a pesar de lo "bitter", es algo que vale la pena.

Recomendación uno: si se puede, verla.
Recomendación dos: tener presente su título original. La historia es, a mi juicio, sobre el "old man", Tommy Lee Jones.

Hoy martes, en una visita a ese antro llamado Alto Las Condes, nos escapamos a ver "Antes de partir". En esta ocasión, el título en castellano está mejor puesto, ya que se entiende totalmente el punto.

Buena película, muy en el estilo de Rob Reiner, director de maravillas como "La Princesa Prometida" y "Cuenta Conmigo", además de otras películas que me gustaron mucho como "Misery", "North", "American President", "A few good man" y la más que popular "Cuando Harry conoció a Sally".

Puede hacer reír y también emocionar. Es más, ha sido una de las pocas películas que casi me han sacado una lágrima. Para mí, fue una hermosa historia sobre la amistad entre dos hombres, pasados los 60 años, moribundos (eso sale en todas las sinopsis, así que no estoy adelantando nada :P), que se encuentran por casualidad y salen a buscar aventuras, de todo tipo.

Amistades así de intensas, son quizás difíciles de encontrar. La velocidad de la vida va empujando a los amigos por caminos que necesariamente no son compatibles. Los trabajos, los tiempos, hasta las pololas, van abriendo brechas que finalmente hacen que la amistad se transforme en un recuerdo, que esboza una sonrisa por todas las cosas que se hicieron, pero que de cara al futuro se intuye difícilemente podrán reeditarse.

Saludos a todos.

lunes, 14 de enero de 2008

"Click"

Acabo de ver por segunda vez esa película. La primera fue en 2006, en el cine. Claro, si la película hubiese terminado con la muerte de Michael Newman estaríamos hablando de una obra más valiosa, pero no me parece casualidad que la echaran a perder al final, y además colocaran ese horrible "one hit wonder" de New Radicals.

Aún considerando ese condoro, la película la encuentro genial. Pero son las 4 am, asi que ahora sólo tengo ganas de dormir.

Quería hablar de que la historia muestra cómo se ve la vida hoy día. Cómo el sistema en que estamos metidos entrega la contradicción de que lo deseable es tener una vida de mierda (money making machine) y al mismo tiempo se añore una vida decente.

Es realmente como por un lado estar obligado a escuchar You get what you give, y conformarse, pero por el otro, añorar esos tiempos donde se escuchaba Linger, Ultra Violet (Light my way), Someday o 20th century boy.

martes, 18 de diciembre de 2007

El tiempo, el todo y la nada.

A raíz del descubrimiento de un gran blog donde la imagen de Freddie Mercury se mezcla con política, he estado estos días re escuchando a eterno Freddie y a Queen. Como ya sabrán quienes se dieron el tiempo de leer mis "Memorias musicales", Queen ha sido mi música de cabecera durante los últimos 16 años. Queen, y los discos solistas de Freddie Mercury y Roger Taylor. (Brian May no sé porque nunca me gustó mucho como solista, aunque hay días en que lo escucho y me arrepiento de no haber comprado el cd de su último disco a un precio regalado en algún mercado de Santiago, allá por el 2002.)

Viajes al Llaima donde era feliz porque iba a poder escuchar música de noche sin que nadie me molestara, mirando desde la ventana del bus esos bosques y pensando que algún día filmaría ahí el Señor de los Anillos o el Silmarillion, con música al estilo A Kind of Magic o Innuendo, y otros de las tantas canciones con aires épicos que tenía Queen. Claro, los problema eran la sorpresiva muerte de Freddie, y en lo principal, que difícilmente me iba a dedicar al cine.

Recuerdo como un momento complicado en 1992, cuando a mis 13 años veía encantado el videoclip de Living on my own, mi viejo, que no es ningún conservador, sino todo lo contrario, me dice "Cómo ves ese video donde salen puros travestis", o algo por estilo. Pero escuchar que un tipo tan grande como Freddie Mercury cantara:

Sometimes I feel I’m gonna break down and cry (so lonely)
Nowhere to go nothing to do with my time
I get lonely so lonely living on my own,

me hacía saber que otro estaba o estuvo tan solo como yo entonces, y por lo tanto mi soledad no era algo tan dramático. "Soledad en compañía", se podría llamar.

Pasaron los años, recuerdo haber superado varios desamores escuchando Love Kills, Somebody to Love, en fin, las típicas penas de amor adolescente, esas que se creen insuperables y al par de días uno anda como nuevo.

Otras canciones como Drowse y su:
Never wanted to be the boy next door
Always thought I'd be something more
But it ain't easy for a small town boy
It ain't easy at all
Thinkin' it right and doin' it wrong,

me tocaban muy cerca, viniendo de un small town como Temuco, bueno no tanto :P

Una canción clásica, Love of my Life, nunca me llegó mucho, aparte de encontrarla bonita, pero nada más. Sin embargo, una vez que estaba terminando con una ex, y ella no quería por ningún motivo que nos separáramos, eso de

Love of my life, you hurt me,
You broken my heart, now you leave me.


Love of my life dont leave me,
Youve stolen my love now desert me,

sí que me hizo sentido. Era yo el que la estaba abandonando, era yo el que estaba desertando.

Aparte de darme algo de pena ese hecho, fue curioso porque siempre había pensado en esa canción para cuando yo fuese la "víctima", pero en este caso era el "victimario".

Grande Queen y Freddie Mercury, viendo sus videos en youtube, cada día crece y crece sus figura. Extraños estos tiempos, donde la religión ha ido perdiendo espacios, pero las ganas de venerar algo, a alguien, de alguna forma, se mantienen, con independencia de la forma y "trascendencia", y de la seriedad o racionalidad involucrada. Chuck Norris, dios ht, pulento laico, Pau Gerpe y tantas otras construcciones en ánimo de chacota y profanas, pero que para mí, denotan que en el fondo, bien en el fondo, inconcientemente, las ganas de creer que llevaron a los griegos a tener miles de dioses, siguen presentes en nosotros.

Yo no voy a venerar a Freddie Mercury, pero su figura claramente ha trascendido a la muerte, y sus canciones continúan presentes. Quizás John Lennon produzca algo parecido. Y para que hablar de las religiones a Elvis y a Diego Maradona.

Quien sabe si algún día nadie se acuerda que empezaron como hueveo, y tenemos un nuevo panteón politeísta. En ese día, ya sé a quien le prendería una velita, a la que tenga la inscripción


I'm playing my role in history
Looking to find my goal
Taking in all this misery
But giving in all my soul





viernes, 30 de noviembre de 2007

Un sentimiento que no termina.

Ser de la U es algo que muchas veces escapa a la razón. Y la vez es aceptar que uno es parte de algo más grande, que trasciende la propia personalidad.


Como chuncho nacido en 1979, está más que claro que mi formación como azul, adoctrinado por mi padre, fue en un período no precisamente victorioso para nosotros. Me tocó sufrir las infantiles burlas por el descenso, mientras el 99% del resto del mundo era de Colo Colo, o así lo parecía.

Ser de la U, ser de los pocos (poquísimos) alumnos de ese colegio alemán que eran del NO, han sido circunstancias de mi niñez que me han marcado hasta hoy.


Esa cercanía al fracaso, esa sensación de perderlo todo pero seguir luchando siempre, seguir vivo y no rendirse, con plena conciencia de que la dignidad no se transa, es una característica que ya forma parte de mi personalidad.

Luego pude por fin ver a la U en vivo, en 1989 en Temuco, aunque seguía siendo de los pocos niños que no era colocolino. Al año siguiente, una vez más la esperanza. Volvemos a Primera, y las esperanzas se renuevan. Pero terminamos como siempre, peleando por no descender, en un partido que le ganamos a la Unión Españolda, donde el Pato traidor metió su único gol en toda la temporada. En la visita a Colo Colo nos saquean, expulsan a Massacesi y nos ganan.

La música es la radio, escuchando los partidos, y sufriendo a muerte cuando perdemos. Los triunfos escasean. En un partido escucho el retorno a la U de un tal Mariano Puyol. Verano de 1991. Estamos en Santiago y vamos a ver un "amistoso" contra la UC. Perdemos, pero un viejo en la barra nos muestra de que se trata el aguante: estamos jugando horrible, perdiendo 0-3 y de repente atacamos. Entonces él gritó: "¡¡LOS TENEMOS!!" No nos rendiremos. Con el partido perdido, la barra se dedica a romper San Carlos. Yo miro. A la salida, todos los jardines están hechos tira, llenos de basura. Qué importa, perdimos pero los hicimos mierda. Somos una masa azul caminando de regreso. Logramos volver al hotel en una micro que traía gente hasta arriba del techo.

Vamos a Osorno. Por una gran coincidencia, nos alojamos en el mismo hotel que la U, y a la hora de cenar, nos encontramos con todos ellos!!! (Mis padres lo habían averiguado, pero yo no lo sabía y fue un momento mágico). Mi papá hecho a correr una lista para que los jugadores firmaran. Todos accedieron. Horacio Rivas me hace una seña para que vaya a su mesa, pero me da vergüenza. Le reclamo a mi papá que cómo hace esas cosas sin consultarme. Luego Mariano Puyol y Juan Soto nos invitan. Voy con mis dos hermanos. Al día siguiente perdemos, y es una tragedia. Lo bueno fue en el viaje de regreso venir escuchanco un cassette que le compramos cn canciones de la barra. Imperio Azul se llama. Escuchamos cánticos mezclados con gritos de goles, pero son escenas demasiado pretéritas. Goles de comienzos de los 80, de Castec o el mítico gol de Salah contra Colo Colo. Pienso que algún día conoceré un campeonato, y las glorias serán presentes y no del pasado.

Puyol es mi ídolo, a pesar de todo. En una clase de alemán tenemos que escribir sobre alguien importante, y escribo sobre el eterno Mariano. Nos salvamos del descenso en la liguilla de promoción, mientras mis compañeros celebraban en mi cara su "tri-campeonato" y su copa Libertadores. No importa, la U no se transa por nada.

En 1992 nos empezamos a afirmar. Temuco sube a primera y vuelvo a ver a la U en vivo y en directo. Perdemos, y pareciera que toda la ciudad lo disfruta. Luego con dos goles de Gino Cofré le ganamos a Colo Colo. Tengo 13 años y estoy demasiado feliz. Comienza la liguilla, le ganamos con baile a la Católica. Pero, como siempre, se quema el pan en la puerta del horno, y al final nos quedamos sin ir a a Libertadores. Estoy triste como la muerte, pero vamos a seguir luchando.

Al año siguiente tenemos aún mejor equipo. Pero Estay y Zambrano deciden traicionarnos, y nuevamente nos quedamos fuera de la Libertadores. No importa, seguiremos luchando, a pesar de los traidores.

1994. José Marcelo Salas se hace realidad. El "Chamelo", la promesa que siempre la rompía en las categorías juveniles, la rompe contra Colo Colo. Ahora será el Matador eterno e ingresará a la historia universal del fútbol. La música es

"CUANDO SALGAMOS CAMPEONES, LO VAMOS A CELEBRAR, CON UN CRUZADO COLGADO DE UN ARBOL Y UN INDIO A RAJA PELÁ"

o la variante:

"CUANDO SALGAMOS CAMPEONES, LO VAMOS A CELEBRAR, CON GOROSITO CHUPANDOME EL PICO Y EL BETO A RAJA PELÁ"

También:

"PUYOL PUYOL JAMÁS TE OLVIDAREMOS"

Y SOMOS CAMPEONES!!! Tremendos todos! El partido lo veo en el depto de mi padre, lo grabo y lo guardo como un tesoro. Vamos a celebrar y Temuco ese día es azul. La alegría se desborda por sus calles y vamos leones y vamos leones!!



En la Libertadores empezamos bien, pero terminamos muy mal. No importa, seguiremos luchando.


1995 somos campeones nuevamente!!! Soy muy feliz. En la Libertadores siguiente, casi llegamos a la final. Nos asalta un ecuatoriano vendido en Buenos Aires. Pero no importa, seguiremos luchando.


1997 pasa sin pena ni gloria. Lo más destacado fue agarrar con una bullanguera en la visita de la U a Temuco, mientras escucho "canten mieeerda". Salgo de IV Medio, y tengo muchas otras cosas en la cabeza.



2007. Han habido tres títulos entre medio. Pero eso no es lo más importante. Lo trascendente es que seguimos vivos, que la U es un sentimiento que no se termina, pase lo que pase. Estoy en Santiago y no me pierdo partido, y cada vez, todas las veces, se me eriza la piel cuando sale la U y empieza a sonar nuestro himno.

Seguimos vivos, y no nos rendiremos. Siempre vendrán mejores tiempos. Soy de la U.

"Memorias" Parte Uno


Pongo mejor la Parte Uno primero, para que puedan ser leídas en orden correlativo.

"Mi Música, las mujeres y todo lo demás"

Parte Uno


(1991-2000)


Introducción (breve)

Esto es una especie de bitácora retroactiva, como si hubiese tenido un blog durante estos 16 años, relacionando mi vida con la música. Mejor dicho, la música metida en mi vida. No es un autobiografía, no es un intento exhaustivo. Son las canciones de mi vida,que me han acompañado en estos largos años. Y hay episodios de mi vida que he omitido, porque vamos, es mi blog, y escribo de lo que me parece bien.

Desde 1991 Queen y Freddie Mercury lo fueron todo. Por lo tanto, en cualquier época de estas memorias es música que estaba escuchando. Desde 1994 hay que agregar a David Bowie.

1991 Innuendo, en Sábado Taquilla. Tremenda canción. Espectacular. Antes conocía a Queen, durante 1990 en mi curso el regalo oficial de cumpleaños fue su Greatest Hits I. Ahora Innuendo es fuera de serie. Empiezo a coleccionar los cassettes de Queen. Llegaré a tenerlos todos, salvo Live Killers.

Campeonato de algún deporte, de Colegios Alemanes, en Temuco. Anda una mina que es de Puerto Montt. Me encanta. Está con una amiga. Le digo a un amigo que las vayamos a sacar a bailar. Él me dice que quiere bailar con la rubia. Genial, la mina que me encanta es la otra. Nos dicen que si, y empezamos a bailar. Should I Stay or Should I Go, es la primera canción que efectivamente estoy bailando con una mina que me gusta. Luego viene algo de Locomia y Roxette. No le pregunto el nombre. Prenden las luces, se termina la fiesta, y nunca supe como se llamaba.

1992"Chupete" Marín, un cabro de Villarrica que era de mi edad, o incluso un poco mayor, que había llegado a mi colegio y tras quedar repitiendo era compañero de mi hermano dos años menor, nos contaba que uno iba a poder enviar información por teléfono, de un computador a otro computador. Sin fax, ni nada de eso. Le rebatí, eso es imposible. ¿¿Cómo se iban a pasar datos por la línea telefónica??. (Marín se suicidó años después. Que descanse en paz).

Musicalmente, el Achtung Baby de U2 es impresionante. Lo escucho una y otra vez. La única canción que no me gusta tanto es Misterious Ways, pero por razones sentimentales.

1993
Años horribles para mi. En los "malones" nunca me atrevo a bailar, y llego a odiar a Roxette y los Guns por cantar las canciones que no puedo bailar.

Me gustan los singles del Very, de Pet Shop Boys.

U2 lanza Zooropa. Stay y Numb son los super hits. También me gustan mucho Zooropa y The Wanderer, cantada junto al mítico Johnny Cash y su vozarrón. Confirmo mi predilección por ellos, empiezo a comprar todo lo que encuentro, y escuchando completos los The Unforgettable Fire, the Joshua Tree, Rattle and hum, me convenzo de que son de los mejores grupos que han existido


1994 Lo taquilla era querer ser Kurt Cobain y después ser Eddie Vedder. Pero el grunge nunca me gustó. Como mucho pasaba a los Stone Temple Pilots. Seguía fiel a Queen, y les preguntaba a todos esos aspirantes a grunges, ¿porque Cobain le hace covers a Bowie? ¿Qué música siempre quiso en su funeral el primer vocalista del grupo que después fue Pearl Jam? Death on two legs, de Queen (1975), según las mismas revistas que ellos compraban para saber "todo sobre sus ídolos".

La U es campeona, y soy muy feliz. Celebramos como locos en el centro de Temuco.

1995 Segundo medio. Internet era algo nuevo. Demasiado nuevo. Carísimo además. Descubrimos el modo de sacar ventajas del proveedor, que me parece era el servicio Lazos, de la UFRO. Un amigo estaba registrado, pero la cuenta la pagábamos entre cuatro, y aspirábamos a caer dentro de un servicio donde eran X horas y más. Apostábamos por ese "más", para que saliera a cuenta. Duramos un par de meses, hasta que al amigo que tenía el contrato se lo caducaron porque nos cacharon. Made In Heaven de Queen, emocionante. Garbage saca su disco, y es genial. Outside de Bowie también.

Me gusta una niña de 8º. Es preciosa, y cada vez que pasa fuera de mi sala, caminando hacia su casillero, nos quedamos mirando. Me mira a mi. Un día me queda esperando a la salida del colegio. ¿Pero me está mirando a mí? ¿Seguro? ¿Y si es a otro? ¿Si me acerco y se ríe de mi confusión? En 2006 volví a compartir con ella, en un curso para egresados de mi universidad. Sigue igual de linda, y todavía me corto un poco al hablar con ella.

Doy mi primera entrevista. De regreso de la gira de estudios al norte (en mi colegio es en II medio, desde que un par de años antes pillaron a dos alumnos teniendo sexo, mansa wea). Parque Arauco, voy a una tienda de música a comprar el cassette azul de Weezer, donde salen Undone y Buddy Holly (que era una de las canciones que traía el CD de Windows 95 para mostrar sus gracias). En la tienda, la vendedora está champurreando con un gringo, que quiere música chilena. Me ofrezco como intérprete. Le recomiendo Los Tres, Los Prisioneros, La ley, Inti-Illimani, y otras cosas. El tipo se llama Marco Werman, y trabaja en la Public Radio International de Boston. Me pregunta si me puede entrevistar, y claro, accedo encantado. Un joven chileno habla de su país. Tengo 16 años.

¿Mi música en la gira? Therapy, aunque se rieran mis compañeros. Años después hicieron Lonely crying only, una de las mejores canciones que he escuchado. Además Pantera, U2, la banda sonora de El Cuervo. Hay competencia por poner música en la radio del bus. Logro poner mi cassette, pero mis compañeras reclaman a la segunda canción. Claro, uno tiene que escuchar las huevadas de ellas, pero no podían con un poco de rock.

La U es bi-campeona, y soy más feliz todavía. Celebramos como locos en el centro de Temuco.

1996 Ya había más ofertas de servicios de internet, aunque seguía siendo algo bastante restringido. En marzo de ese años hicimos el primer "asado de IRC", en el campo de uno de los nuestros. Con el correr del tiempo, esa fecha se fue distorsionando, llegando algunos a afirmar que había sido en 1994, pero era cosa de ver las fotos de un par de amigos mechones, todos rapados. Que caras de pendejos teníamos. Ahora podemos seguir siendo pendejos, pero con cara de más viejos, que es algo peor.

Buenos años, donde tuve el gusto de ser un aspirante a hacker. Mi hit fue cuando llamaron a mi padre, para avisarle que tenían registrado que desde la línea de mi casa se había ingresado con la cuenta de una imprenta, de Santiago. Yo era menor de edad por entonces. Había crackeado esa cuenta, aunque ya ni me acuerdo cómo pude haber hecho cosa semejante. Lo amenazaron con una demanda, pero él como buen abogado, les dijo que le encantaban los juicios. No pasó nada. Pobre imprenta, les debe haber llegado una buena cuenta. No me culpen si en Chile se imprimieron menos libros ese año. Tenía 17, y sabemos que nadie es serio a esa edad.

También usamos cuentas del ministerio de educación, entre otras. Nunca pasó nada.

Y llegamos al IRC. En un comienzo, era un punto de encuentro, al menos en el canal #temuco. Al final todos éramos conocidos, la ciudad es chica, y el acceso a internet no estaba masificado. Fue una buena época, para ponerse de acuerdo en jugar Doom en línea, o simplemente entrar a las 20:00 para agarrar OP (@). Eso era ser operador del canal, y era un potente signo de status. No me interesaron mucho esos símbolos. Tenía vida propia, en la vida real.

Empezamos a tomar. Vamos a la casa de un compañero alemán, que se lo pasa solo pues sus papás aprovechan de recorrer Chile en cada fin de semana largo. Cerveza y Risiko, que es como el Ataque alemán. Todos se curan. Canciones de The Police son bailadas desenfrenadamente. No me curo nunca. Quiero vomitar, todos vomitan y yo siempre sigo sobrio.

Caminamos por Avenida Alemania, venimos de despedir a una compañera que se va de la ciudad. Un amigo anda con un walkman, y nos detenemos a escuchar la definición a penales entre la U y Defensor Sporting allá en Uruguay. Ganamos y hasta los colocolinos del curso celebran con nosotros.

Sueño con bailar When you're gone con aquella niña, que ahora está en 1º medio, pero nunca me atrevo siquiera a hablarle. The Cranberries son muy buenos. El año anterior le regalamos el No Need To Argue a mi mejor amigo. El resto del tiempo, rayo con Hallo Spaceboy, la versión de Bowie con los Pet Shop Boys. Hay un gran canal de música, cuyo nombre no recuerdo, que la pasaba constantemente. Tenía que escucharla cada vez. Meses más tarde me compraré el EP, donde viene una versión en vivo de Moonage Daydream, otra de Under Pressure y un mix de Hearts Filthy Lessons.

Logro curarme con pálida. Lamentablemente fue en el cumpleaños de un ex compañero que era bastante popular, por lo que la mitad de mi colegio me vió como trapo.

Antes de partir a Alemania, despedida en mi casa, con mis amigos. El show corre por cuenta de uno en particular, que junto a mi hermano menor se robaron la película. Despertamos con el clásico Jump, y caminando hasta el colegio nos demoramos 1 hora en un trayecto que diariamente tomaba menos de 15 minutos.

Cerramos el año con Atari Teenage Riot y su Speed.


1997 Era de los muy pocos de mi curso que entraba a IV medio y no era virgen (en el viaje a Europa, pero eso es material que definitivamente guardaré acaso para mis memorias). Ni idea si eso le ponía algún grado de presión a mis compañeros. Pero a mí sí me colocaba presión el hecho que algunos de mis amigos empezaran a pololear, y yo no, y tuvieran menos tiempo para jugar fútbol o juegos de fútbol en PC.

Daft Punk con Da Funk, Around the World y Revolution 909 amenizaban los carretes, donde la gracia era tomar la mayor cantidad de trago posible. Recién en 1999 escuché el Homework completo, un tremendo disco.

En 1997 vimos Trainspotting, y su soundtrack fue la banda sonora de mi salida de IV medio. Está bien, tuve que tragarme las típicas mamonerías de la ceremonia de graduación, onda 1492 y eso, pero en mi cabeza sonaban Brian Eno o Iggy Pop.

El mal rato de las canciones mamonas lo pasé una vez, ya que ni siquiera fui al ensayo de la ceremonia de graduación (¿es necesario ensayar algo tan fácil como caminar de la mano con una compañera y luego subirse al estrado?). Mis compañeros me fueron a buscar a la casa. Mientras caminaba hacia la cocina, les grité que iba a llamar a los pacos. Seguí caminando y se habían ido. Siempre han sido medio cobardones y hasta el dia de hoy juran que mi broma era en serio. Seguro no sabían que a los 18 yo tampoco podía ser serio.

1998 No tendría polola hasta mediados de este año, no sin antes haber tenido otra gran aventura para un pendejo de 19 años, que si algún día publico mis memorias me comprometo a contar, pero que me da pudor (¿que pasa si mis padres leen esto?). Sólo diré que tuve mis días de "sexo, drogas y rock'n'roll", en Santiago, con una mujer 10 años mayor que yo. Para el resto, esperen :P

¡Y llegó mi primera polola! Para variar era mayor que yo, pero un par de meses. Los suficientes en todo caso para haber salido del colegio un año antes que yo. Luego me di cuenta que me venía joteando desde el verano. Yo ya tenía muchas horas de sexo en el cuerpo, pero fue agradable descubrir que una niña bonita se preocupara por mi. (Ella en el colegio pasaba piola, no era de las "minas" de su generación. Principalmente por una cosa de actitud. Pero era muy linda, tanto que en un viaje a Lican Ray, paseando por la playa, un grupo de pendejos me empezó a aplaudir por la mina con la que andaba). Tenía por fin alguien con quien conversar.

La onda había empezado cuando un amigo me invitó a ver los videos de la Franja del No, en casa de ella. Ni pescamos los videos, empezamos a conversar y teníamos muchas cosas en común. Demasiadas.

Con las hormonas a mil, no había mejor sensación que ir en el mítico Vento de regreso a mi casa, a la hora que empezaba a aclarar (que otras veces era de día, a las 8 de la mañana), escuchando Deep Blue Day, luego de haber pasado la noche con ella. O cantando Lust for Life. El sexo, la música y una fumada de un pito miserable, me hacían sentir como el mismo Mark Renton por las putas calles de Edimburgo.

Ese amor duró hasta una noche de Teletón (otra razón para que me cargue el show alrededor de esa buena obra), en que ella prefirió quedarse con unos amigos fumando unos porros en lugar de volverse conmigo. La volví a ver dos veces más, una para avisarle que terminábamos y un par de años después en el supermercado.

Por fin me siento cómodo en una discoteque. Íbamos con amigas del IRC, finalmente tenía con quienes bailar sin miedo a que me digan que no. Además la Block está casi a nuestra disposición, porque todo el mundo se fue a la disco de moda. Es como tener un living gigante. ¿La música? Es casi lo de menos, nada memorable, pero totalmente soportable.

Cerré ese 1998 lleno de experiencias, siendo echado de la UCT, donde había entrado a estudiar Derecho, por reprobar no me acuerdo cuantos ramos por mera inasistencia. En el par de ramos que fui, me fue bastante decente. Lo suficiente para que años después ese profesor se acordara de que fui buen alumno.

Tiempos de She's a Star de James (disco de 1997). Una de las pocas canciones que canto decentemente y que me sé entera, y que no es de Queen.

Con mi mejor amigo decidimos bailar Born Slippy (otra vez Trainspotting) donde fuera. Bastaba que escucháramos el comienzo para salir a buscar cualquier mina, cómo fuera, y poder bailar.

1999 Verano, Desibelius discoteque, en Licán. Primera vez que agarro curado en una disco. A una ex compañera del 98. Puro efecto del copete. Bailamos Procura y empezamos a atinar. Al otro día cuando me acordé, andaba medio escondido, pero nos encontramos igual. Piola.

Ya las conexiones a internet habían mejorado bastante, era normal poder conectarse todo el día y dejar bajando música, que también se encontraba en páginas. Para empezar, bajé gigas y gigas de Queen. Recitales en todas partes, lados B, todo lo que encontraba.

Escucho por primera vez Goin' Back, cantada por Freddie Mercury, cuando su nombre artístico era Larry Lurex. Tremenda canción. Me emociona cada vez que la escucho. La canción la compusieron Gerry Goffin y Carole King, y es una suerte de declaración de principios que en mí al menos, permanece absolutament vigente:

I think I'm going back
To the things I learnt so well in my youth
I think I'm returning to
Those days when I was young enough to know the truth
Now there are no games
To only pass the time
No more colouring books
No christmas bells to chime
But thinking young and growing older is no sin
And I can't play the game of life to win
I can recall a time
When I wasn't ashamed to reach out to a friend
And now I think I've got
A lot more than just my toys to lend
Now theres more to do
Than watch my sailboat glide
And every day can be
My magic carpet ride
And I can play hide and seek with my fears
And live my days instead of counting my years
Then everyone debates
The true reality
I'd rather see the world
The way it used to be
A little bit of freedom's all we lack
So catch me if you can
I'm going back

El resto del año fue una época de estudios más que nada. En mi nueva universidad me empezó a ir super bien. Y seguimos con el IRC, ya como Superstar, por el tremendo cover que Sonic Youth hizo de esta canción de los Carpenters. IRC estaba derivando de un grupo de amigos, a jotearse minas, a agarrar con ellas, a luego enterarte que te habías cagado a un amigo, que pololeaba con la misma mina que te acababas de agarrar, a más marihuana, a casi pura marihuana (una vez en un pito hecho con una toalla nova, es verdad, no estaba tan volado como para no acordarme), y luego embarazos y ahí todo se pudrió para mi.

2000 Verano. Viajo a Santiago a un encuentro internacional, el mismo día domingo del triunfo de Lagos. Por cada pueblo que pasamos habían celebraciones. Creíamos de verdad que Mañana será otro Chile, y había trabajado duramente por eso, recorriendo Temuco y juntando una serie de anécdotas. Y además, votando tres veces por él (primarias, y primera y segunda vuelta).

En el encuentro conozco una mina. Interesante, hermosa, me pesca, conversamos de todo. Otros cabros de Temuco, me preguntan inquietos ¿La conoces? Está arrendada "Las Brujas", sólo para nosotros. Cometo un error, entro a la discoteque un poco más curado de lo aconsejable. Pero igual empezamos a bailar. Hay onda. Un argentino que anda en el encuentro se me acerca y me dice: "Che, que linda que está tu novia". Le digo algo como que estoy enamorado. La vienen a buscar, alguien de su grupo tiene un problema. Pienso que es una excusa y me voy a tomar a la barra. Ella me anduvo buscando, pero me dediqué a tomar. Diez gin con gin. Mañana siguiente, como pico, con pena y acañado, nada peor. Vamos de paseo al Cajón del Maipo. En el bus una niña de Temuco me dice que me aleje de ella, porque ando con el medio dragón. Me amurro. Ella cacha que las cagó, y nos hacemos buenos amigos, compartiendo penas de amor.

Dejo de tomar. Hasta fines de 2002.

Lo mejor en ese tiempo era el Napster. Y bajar música como enfermo de la cabeza. Heroes del Silencio, Groove Armada, Pulp, Moby, New Order, Squirrel Nut Zippers, Frank Zappa, Travis, Los Amigos Invisibles, Los Pericos, Enigma, Tom Waits.

Luego de eso, empezó la época de leer el New Musical Express, que se creen, si era un chico brit, y había que estar en onda. Placebo era un viejo conocido en ese entonces (en ese tiempo tuve el Without I'm nothing (1998), tremendo disco que presté y perdí). Suede, Oasis, para qué decir Blur.

¿Las minas? En aquellos años, todas escuchando a Arjona, Maná o insufribles por el estilo. Musicalmente la única que conocí y que valía la pena, tenía muchos años menos que yo, y a pesar de ser super interesante, me sentí incómodo estando en su pieza, solos. Otra vez el recuerdo de Mark Renton y su colegiala. Yo, un chico universitario de 22 años, no iba a agarrar con una colegiala de 14. Puros escrúpulos. En 2000 tuve una polola, buenos recuerdos, pero éramos muy diferentes, y musicalmente también. Terminando el año, termina el pololeo.

Mi mamá me regala la Solo Collection de Freddie Mercury. Un tesoro.

lunes, 26 de noviembre de 2007

"Memorias" Parte Dos

"Mi Música, las mujeres y todo lo demás"

Parte Dos

(2001-2007)



2001 Enero, escuchando a Placebo llego a Santiago y un amigo (el mismo que me llevó a la casa de esa polola de 1998), insiste en que vayamos a almorzar a la casa de su polola. Percibo algo raro en su insistencia. Llegamos a la casa de su polola, y junto a ella está una mujer tal, que la miro e inmediatamente pienso que nunca me va a pescar una mina así. Pero me habla. No sólo eso, empezamos a conversar y el espacio-tiempo se disuelve. Quedamos solos en el patio, y es como si no hubiese nada más en todo el universo que ella. Perdí la noción del tiempo, tanto que a las tres de la tarde habia quedado de juntarme con un amigo, y de repente me llaman. Pienso que tan tarde será, cómo tan apurado. Y eran cerca de las seis. Más encima, con ella había onda. Eso ya no lo podía creer.

Dias después me invitó a su casa en la playa, pero me devolvía ese día a Temuco junto a mi mejor amigo. Podría haberlo dejado botado, pero nuevamente los escrúpulos me lo impidieron. Es mi mejor amigo. En el viaje hasta Temuco debo haber hablado toda la noche sobre lo hermosa que era ella. Y escuchamos Queen (por ahí leí que una Ley, de esas posmodernas, sostiene que todo cassette dejado en la guantera de una auto, al cabo de un par de meses se convertía en un Greatest Hits I de Queen).

Febrero lo pasé escuchando todo el dia XTRMNTR (2000), de Primal Scream. Licán-Ray. Almorzábamos con un amigo que era (y sigue siendo) genial, y su genialidad en aquel momento consistía en echarle vienesas picadas y algo de morrón a los tallarines con salsa que comíamos todos los días.

Con la mina de Santiago, a partir de marzo tuvimos encuentros y desencuentros, todos telefónicos, hasta que en septiembre se apareció en mi casa y empezamos una especie de relación que duró unos dos años, hasta 2003. Ella nunca estuvo sólo conmigo, la compartía con su (ex). Pero que chucha, era la mina más rica del mundo, y al menos parte de ella estaba conmigo. Era suficiente para mis 21 años.

Curioso lo de Primal Scream, presente al comienzo y al final ya que cuando decidí no saber más de ella, no responder sus llamadas, ni sus correos, definitivamente, a fines de 2003, podría jurar que Miss Lucifer fue compuesta especialmente para ella.

"Descubrí" The Strokes, cuando apenas habían lanzado su disco. Un amigo me pasó el dato: "Mira en la NME, están hablando de una banda de Nueva York, que suena muy bien". Bajé sus canciones y ese fue uno de los momentos (musicales) en que he sido más feliz. Finalmente el reinado de las boys-bands, se estaba acabando (igual Five me gustaba su resto), y empezaba a florecer el rock. Ya dejaba de ser música alternativa. Una de las cosas que quizás lamento de esos años, es no haberle prestado mucha atención a los Manic Street Preachers. Ahora lo he hecho y los considero la mejor banda del mundo, pagando mis pecados.

Weezer
se merece una mención especial. Canciones como Susanne, Don't let go, Island in the sun, Teenage Victory song, me hicieron y hacen sentir muy bien.

Aparece Get Ready, y New Order confirma que es una gran banda, a pesar aún me quedaba mucho por conocer de ellos. Los empiezo a escuchar masivamente.

Un gran grupo, Radiohead, para mí duró hasta el OK Computer (1997). En este tiempo sacaron nuevos discos, pero era otra cosa, el sentimiento que me producía era diferente.

2002
Placebo, The Strokes, la rompían, y a mis tímpanos también. Junto a ellos salieron una serie de bandas "The algo", pero ninguna que los igualara. The Vines es un buen ejemplo. Les dieron demasiada importancia, y no sonaban nada de bien. The Hives en cambio, pasaban piola y eran muy buenos. Robbie Williams era algo aparte, no era rockero, pero es de la poca música "gusto de mina" que me agradaba.

Una curiosidad: Bajo un disco de un grupo llamado ...and you will know us by the trail of dead. Me gusta un poco, nada espectacular. En eso vuelve un amigo desde Alemania, y con él siempre compartíamos gustos musicales. Me cuenta de lo nuevo que escuchó allá, en onda de primicia...y era el mismo disco que yo ya había bajado. Grande Napster!

Con "mi" mina en Concepción, escuchamos FM Dos. La llamaba por teléfono y oíamos las mamonas canciones, pero que se me aparecían, en ese momento, como algo romántico. Me promete amor eterno. Viajo a verla, siempre escuchando a los Strokes, o un disco con canciones de Moby, Queen, Mick Ronson, Los Prisioneros y otros. Le mandó flores, hago de todo.

Viajo a Concepción a ver a "mi" mina, con dos amigos. Las cosas salen horribles, y a pesar de que ella quiere que nos arreglemos, decido que se acaba todo (aunque no se acabó). El retorno a Temuco fue dramático, pero mis amigos cachan como me siento y aguantan que viaje cantando el Greatest Hits I de Queen, con mi "afinada" voz.

Lo rescatable de ese viaje, es que conocí la "República, Bar-Restaurant y Sede de Gobierno", un lugar que luego cambió de nombre, pero mantenía un gran estilo, en pleno barrio Estación de Concepción.

En junio muere mi perro, Schutz (1987-2002). Un fox-terrier, el mejor amigo que pude tener cuando chico. Descansa en paz, todos los perritos se van al cielo, y Schutz era el mejor. En esos días escuchaba a Andrew WK y Jimmy eat world. Party Hard y The Middle son canciones que aún me evocan tristeza.

Antes y después: Oasis, Blur, BRMC, Manic Street Preachers, y siempre la música de Queen y sus integrantes, especialmente la de Roger Taylor, además de David Bowie, eran el resto de mi soundtrack.

Uno de las consecuencias que lamenté del fin de las odiosas "boys-bands", es que abrieron el camino para esa mierda que fue el Axé. Me retiré de las pistas. Si bien los Backstreet Boys eran desagradables, al menos sus canciones permitían que cada uno bailase como quisiera. Por lo que me decían, bailaba re bien. Pero el Axé representó un triunfo para los paquetes. Sólo había UNA forma de bailar sus canciones. Y como me tocó ver en una patética escena, la gente de verdad se ponía frente al televisor y ensayaba las coreografías de Mekano. Ahora cualquiera que se esforzara podía bailar! Las pistas de baile se transformaron en grandes salones de gimnasia aeróbica, era impresionante ver como todo el mundo bailaba de idéntica forma.

A mediados de ese año empecé a pololear, esta vez mi polola era 3 años mayor. Una de las mejores personas que he conocido en mi vida. Ella era genial, y nuevamente la música jugó un rol fundamental. Ella tenía un cassette de los Pet Shop Boys, Introspective (1988). Estábamos en un carrete en su casa, muy en la onda "soy universitario y soy revolucionario", y le pedí que lo colocara, y lo colocó, me convencí que era una mina que no podía dejar pasar. Always on my mind es la canción que nunca le dediqué, pero que se merecía. Nunca le pedí pololeo, pero éramos una progre "pareja". La canción de los PSB era Always on my mind. Maybe I didn't treat her quite as good as I should.

Estuvimos juntos desde mediados de 2002 mediados de 2003, aunque nos despedimos a fines de ese 2003. Musicalmente, aparte de ese acercamiento por los Pet Shop Boys, no teníamos mucho en común. Pero no importaba, a ella no le molestaba mi música.

Una noche, sintiendo que el mundo es el peor de los lugares posibles, con ganas de dejar de existir (no de efectivamente matarse, pero sí deseando desaparecer con fecha de regreso incierta), The Flaming Lips salvan mi vida, con su Yoshimi Battles the pink robots. Faithless con We Come One también aportan.

Navidad de 2002: Heathen, de lo mejor de David Bowie, en toda su carrera. Himnos para los tiempos que corren, post 11-S. Testimonios de que los sueños del mundo global y progresivo que existió después de la caída del Muro de Berlín se habían acabado.

2003 El segundo disco de The Strokes, el tremendo Sleeping with ghosts de Placebo, Mercury Rev, Badly Drawn Boy, más Primal Scream y estoy exponiendo en un congreso estudiantil de derecho. Ahí conocí a la que fue mi polola entre fines de ese año y mediados de 2006. Ella venía de toda la cultura de izquierda, se sabía las canciones tradicionales de Inti-Illimani, Silvio Rodríguez, etc. Nunca tuvo mucho interés por mi música, a pesar de que con el tiempo dejó de reclamar. El único punto de encuentro fue Calamaro. Pero jamás entendió que Absolute Beginners es la canción de verdad más romántica que se ha escrito.

Leonard Cohen fue otro que "descubrí" en este tiempo. De una manera bastante curiosa: En Space anunciaban una película, Exotica, y la música que sonaba me encantó. Cachando lo que decía la letra, la googelié, y resultó ser Everybody Knows. Bajé una canción, otra canción, un disco, muchos discos, toda su discografía, y Cohen es un grande. La canción y el video de First we take Manhattan, es casi un resumen de mi pensamiento político y de mis sueños en la sociedad.

En algún momento del año, este es el playlist que escucho:

Alien Ant Farm - These days
Chemical Brothers - The Golden Path
David Bowie - New Killer Star
Dido - White Flag
Jet - Are you gonna be my girl
Junior Senior - Move your feet
Junior Senior - Rythim Bandits
Kings of Leon - Red morning light
Kraftwerk - Tour de France
Leonard Cohen - Everybody knows
Morcheeba - Rome wasn't built in a day
Muse - Our time is running out
Rooney - Blueside
Saybia - In spite of
Starsailor - Poor misguided fool
The Coral - Dreaming of you
The Coral - Secret kiss
The Darkness - I believe in a thing called love
The Datsuns - Motherfucker from hell
Mars Volta - Inertiatic Esp
The Music - Getaway
The Raveonettes - That great love sound
The Sounds - Seven days a week
The Strokes - Between love and hate


2004 Franz Ferdinand. Tremendo descubrimiento. Tal como con los Strokes, el NME me advirtió a tiempo de la aparición de ese extraordinario grupo. Fue mío por un tiempo, hasta que empezó a sonar masivamente. En este tiempo, el napster estaba muriendo, o ya había muerto. Con los programas que siguieron la sobreoferta de música me empezó a copar, pues ya no se trataba de compartir lanzamientos o primicias, sino competir por quien tenía la versión más rara de una canción conocida. Siempre me reía de que faltaba poco para que llegara alguno "oigan, bajé "Army of me", cantada por Björk en el baño de su casa. - Ah, la que canta en la ducha?.- No, cuando está cagando".

Me dediqué a bajar música para mí, sin conversar de ella. El concierto de Roger Taylor en Shepherds Bush, o a Lorette Velvette, que nunca salieron en el NME, y por lo tanto, a nadie le interesaron. Grupos como Pavement, Grandaddy y otros similares, simplemente los salté.

Empecé a bajar todo sobre Interpol. Si bien los conocía desde su lanzamiento, dos años antes, fue con Antics (2004) que me hice fan de esta gran banda. Es increíble. Escuchar C'mere es para dar gracias a la vida. Slow Hands, Not Even Jail, Public Pervert y del primer disco las grandes Obstacle 1 y PDA. Son las que destacaron, pero ambos discos son muy sólidos.

En este tiempo también terminé de completar mi colección de Roxy Music. Que tremendo grupo, que tremendas canciones. Bryan Ferry como solista también es espectacular.

Escucho repetidamente temazos como Bird Of Prey de Fatboy Slim, Star Guitar de Chemical Brothers y There Goes The Fear, de Doves. Tres grandes videos para escapar, al menos a través de sus imágenes. Lou Reed reaparece.

2005 The Thrills, Yeah Yeah Yeahs, Zapato 3, Saybia, Starsailor, The Bellrays, nuevo disco de Franz Ferdinand, Saint Etienne, sumados a los de siempre. Quizás escuchó más música porque estoy más solo que nunca. Terminé los ramos serios en 2004. Las clases habían terminado, tenía que empezar mi memoria. La polola en Concepción, los amigos emigrando a Santiago. Éramos Interpol y yo. Black Box Recorder, The Flaming Lips de nuevo, The Walkmen.

Kusturica ya es una realidad. A pesar de no gustarme, el grupo con que que bailamos sí me gusta, y se ha convertido en un clásico. Respecto de ellos, siempre he pensado en dos canciones. Una para todos los clanistas de Chile, All the Madmen, especialmente por la parte que dice:

"cause I'd rather stay here
With all the madmen
Than perish with the sadmen roaming free
And I'd rather play here
With all the madmen
For I'm quite content they're all as sane
As me"

Los objetivos que decimos perseguir, realmente hacen dudar de la sanidad mental de quienes vamos tras ellos, en esta sociedad que se dedica a practicar precisamente todo lo contrario. Pero como dice Bowie, prefiero estar acá, con todos estos locos lindos, que vagar libre con los hombres tristes. Y la canción que al 111 le viene de perillas, es The Fairy Feller's Master Stroke, de Queen. Si algún día ven este video, podrían empezar a adivinar quien puede ser quien dentro de toda la fauna de personajes que aparece en el pueblo de las hadas.

Fuera de eso, David Guetta con su versión de Heroes me sube el ánimo.

2006 En abril aprobé mi memoria, es calificada con un 7,0. Tengo que estudiar para el examen de grado y hacer la práctica. Desde abril soy militante del PS. Hay campaña interna, y como siempre estoy donde creo que es correcto. Perdemos con las Grandes Alamedas. Por coincidencias, soy relativamente conocido. Me toca estar en negociaciones para las elecciones de la JS. Se pudre todo, escuchan más a otros, y la elección es un desastre, pero al menos fui el único que vio claramente cómo iban a ser las cosas, y lo dijo.

A mediados de año el pololeo se termina. Estoy contento. Supongo que me debería sentir mal. Pero escuchar Emma get me a lemon y Another one goes by, de The Walkmen me carga de toda la nostalgia que debería estar sintiendo. Ella es una gran persona, y espero que le ocurran todas las cosas buenas que se merece.

Escucho Crazy de los Gnarls Barkley. Automáticamente la declaro una canción para la eternidad. El video de su presentación es además espectacular. Nadie puede decir que no le gusta una banda donde Chewbacca toca la batería...

Viajo a Santiago. Me reencuentro con una vieja amiga. Vamos al Berry. Andamos paseando en la noche en su auto, sin destino. Escuchamos Erasure, a los dos nos gusta. Se acuerda de mi pasión por Queen. Ella me gusta, pero no quiero tener la sensación de que la estoy usando para olvidarme de mi ex. Ella es de verdad, y se merece algo de verdad. Regreso a Santiago, me gusta, y no tiene nada que ver mi ex. Pero nuevamente se escapa el beso oportuno. Me deja en el depto donde me estoy quedando. Tomo un taxi y parto para el suyo. Ya se murió la emoción, y seguimos siendo amigos. La quiero mucho, ella es muy importante para mí.

Vuelvo a Temuco, escucho como loco a Manic Street Preachers. Todo de ellos. Soy socialista, pero no me gusta mucho la música "oficialmente de izquierda". Me gusta el rock, el maldito rock, de Los Manic en Know your enemy, y sus canciones The Masses Against The Classes, Freedom Of Speech Won't Feed My Children, Ocean Spray o So Why So Sad.

Estoy soltero, tengo amigas con ventaja. Tras estar practicamente 8 años seguidos con pareja, no tengo ganas por el momento de volver a eso. Ella tendría que ser alguien demasiado especial, que me volara la cabeza. Pero mis amigas son muy buenas amigas, y eso. Pienso en No puedo enamorarme de ti, de Joaquín Sabina. Esa canción es brutal, pero es honesta. También salgo con otra amiga, con la que no pasa nada, aparte de darme ideas para algunos poemas. Me da besos a la mala cuando nos despedimos, pero luego habla de su novio y de lo enamorada que está. Me apesto de ella. Me pide que no la deje sola. Me voy. Otro amigo se la tira. Pienso en No me nombres, de Javier Calamaro. Me gustaría que ella no nombrara nunca en su vida que estuvo saliendo conmigo.

Nuevo disco de Muse: Black Holes and Revelations. Uno de esos pocos discos donde todas las canciones me gustan. Es excelente. Starlight, Knigths of Cydonia, Exo-Politics destacan sobre el gran nivel del disco.

Octubre, viajo a Vicuña a un encuentro, y conozco el perreo. Maldito reggaeton. Pero medio curado, bailando, es genial. Sin palabras, apenas un hola, estoy agarrando con una mina mientras perreamos. Es la onda. A la tercera vez que me pregunta como me llamo, me apesto. No me voy a andar agarrando cabras mas chicas y curadas.

Lo que me apestó esa noche fue que había estado toda la jornada previa a esa fiesta en conversaciones con una mina re linda y simpática. Tomamos juntos, en la hora del baile se definía todo. Fue al baño. Pésima señal (nunca vuelven). La del perreo se me pone por delante y empezamos. La otra vuelve (sí, volvió). Pero ya estaba con otra, y no la ví más. Por bailar con la mina curada, me perdí de la que me interesaba, así que me aburrí de ella también, y me fui a tomar hasta que me dieron ganas de fumar, lo que hubiese. Eso significa un grado sumo de alcoholización en mi parsona.

Placebo tocó y se anuncia de nuevo en Chile. Me dan ganas de ir. Pero enfrentarme a una multitud de pendejos posando de gays, me quita las ganas. Si tuviera años menos, habría andado ponziando probablemente. Pero este cuento de las poses me carga. Como decía el gran Curt Wild en Velvet Goldmine (1998):

"Everyone’s into this scene because it’s supposedly the thing to do right now. But you just can’t fake being gay. You know, if you’re gonna claim that you’re gay you’re gonna have to make love in gay style, and most of these kids... just aren’t going to make it.

That line, ‘Everybody’s bisexual’, that’s a very popular thing to say right now. Personally, I think it’s meaningless."


No cacho cual será la onda actual, tan parecida a los británicos 70's que refleja esa película, de andar posando de gays. O son o no son, pero me parece que es mucha pose, y odio las poses.

2007
Tengo que dar el examen de grado y hacer la práctica. Pero Muse es demasiado bueno y tengo que escucharlo de nuevo, como hace meses. Vivo en Santiago, me gusta una cantante. Salimos, lo pasamos bien, pero no pasa nada. Me siento mal. Ella se interesa por mi música. Le muestro Your love alone, de los Manic con la vocalista de The Cardigans. Le gusta. Ella es cantante lírica. Pero sigue sin pasar nada. El momento de besarla fue afuera del Panorámico, pero no me atreví. Maldito Panorámico. El Sunlight Makes Me Paranoid, de Elefant, me sube el ánimo. Tonight, we'll dance, LIKE we're in love. Me conformo con un beso.

Nuevo disco de Interpol: Our love to admire, una maravilla. Quiero escribir sobre ellos, pero no lo hago, y la época de su lanzamiento pasa y ya no es novedad.

Noviembre de 2007 Tengo que estudiar para mi examen de grado y hacer mi práctica. Era madrugada de domingo y comienzo a escribir. Está amaneciendo en Santiago, y tengo que estudiar para mi examen de grado. Mierda, debería ser un rockstar y escaparme de esto.